lunes, 14 de enero de 2019

Histología Vegetal: Estructura de la Raíz

La raíz de los vegetales es la estructura encargada de:

  • Sostener la planta, anclándola al suelo y permitiendo su crecimiento en altura.
  • Obtener los nutrientes básicos que necesita para realizar su actividad metabólica básica, es decir, agua y sales minerales.
En la raíz de la planta encontraremos pelos radiculares que se encargarán de obtener del suelo agua y sales minerales. Estas serán transportadas por los tejidos conductores a las zonas de la planta donde se realizará la fotosíntesis, es decir, a las hojas.

Recordemos que la mezcla de agua y sales minerales capturadas del suelo constituyen un líquido que denominaremos savia bruta. Esta será transportada por medio de tejidos conductores denominados vasos leñosos o xilema.

En las hojas y mediante el proceso fotosintético, la savia bruta es transformada en savia elaborada. Es decir, el agua y sales minerales se convierten en moléculas orgánicas de mayor complejidad (se trata de un proceso anabólico), entre las que destacan los azúcares y aminoácidos.

Las moléculas orgánicas son esenciales para el desarrollo y crecimiento de la planta. Por ese motivo, deben ser transportadas a toda la planta, incluida la raíz.

La savia elaborada es distribuida por toda la planta mediante los vasos liberianos, que forman parte destejido conductor denominado floema.

En las raíces, los tejidos conductores suelen encontrarse en la zona central de la misma. Se separan del resto de la raíz por una capa de tejido de recubrimiento interno, es decir, mediante una capa de endodermis.

El cuerpo de la raíz está constituido por tejido parenquimático, carente de cloroplastos (al encontrarse bajo tierra, no realiza fotosíntesis). Este tejido es usado, ocasionalmente, para acumular sustancias de reserva, como almidón.

La raíz está separada del exterior mediante una capa de células denominada epidermis. En esta capa celular encontramos células epidérmicas modificadas que constituirán los pelos radiculares.


La función de estos pelos no es la absorción, tanto en cuanto toda la superficie de la raíz tiene capacidad de absorber, sino localizar agua y sales minerales y condicionar así el crecimiento de extensiones.